La Seu (La Catedral)

En su interior podremos diferenciar distintos estilos y admirar la maravillosa iluminación de sus vitrales y del gran rosetón.

La construcción de la Catedral de Palma es inmediatamente posterior a conquista catalana de la isla en 1229. Cuenta la leyenda que una tormenta sorprendió a Jaume I en su viaje hacia la isla, y que éste, rogando a la Virgen por su salvación, hizo una promesa. Si conseguían salir con vida de semejante peligro, construiría un templo dedicado a ella.

Así, la construcción de la que sería la Catedral de Palma se inició a principios del siglo XIV. En el lugar que ocuparía la nueva construcción se alzaba entonces la antigua mezquita musulmana, que se convirtió en templo cristiano a la llegada de las tropas catalanas, y fue usado como tal durante largo tiempo.

La Seu - éste es el nombre que recibe en Palma - se empezó a construir siguiendo los modelos de las construcciones del momento, cuidando desde el inicio de la obra todos los detalles.

La parte más antigua edificada es fruto del deseo de Jaume II de ser enterrado en una capilla -que hoy se corresponde con el ábside-. A mediados del siglo XIV se decidió aumentar la altura del templo conservando la parte construida como presbiterio. Esta iniciativa modificó sustancialmente el plan inicial, ya que pasó de ser un proyecto de templo de una sola nave, a otro, mucho más complejo, de tres. El director de las obras en este tiempo fue Jaume Mates. A finales de este mismo siglo se iniciaron las obras del Portal del Mirador, bajo la dirección de Pere Morey. Éste es posiblemente el conjunto escultórico más destacado de la época. A finales del siglo XVI se acaba de construir el templo, iniciándose la construcción del Portal Mayor. Hoy, este portal es el único elemento que queda de la fachada original, que fue seriamente dañada por un terremoto en 1851.

La construcción de la Catedral se alargó durante dos siglos, en los que nuevas aportaciones relacionadas con el cambio de dirigentes de las obras, y el cambio de las tendencias estilísticas, fueron configurando un templo único y extraordinario que sería consagrado en 1601.